lunes, 5 de octubre de 2015

Despertar

Se encontraba en ese lugar y en ese momento, sus instintos la habían llevado hasta ahí se despojó de temores y aquella habitación sutilmente preparada por él daría cuenta de un amor...

Para entonces ya había olvidado como era el sabor de un beso, la suavidad de una caricia, el calor de un abrazo, se sentía nerviosa pero con ganas de ser realmente amada y valorada como mujer.

Tenía un matrimonio que le dio dos hermosos hijos, luchó para mantenerlo pero fueron las constantes guerras que lo llevaron al fracaso.

En aquella habitación no faltaban las palabras que cortaran el momento,bastaban las miradas que podían decir más ...

Él se acercó, tomó sus manos y con delicadeza las besó...
Ella pudo sentir el nerviosismo, ya no recordaba la última vez que sus manos sintieron el calor de un beso, habían estado acostumbradas al forcejeo de una pelea... 


La miró y con suave caricia recorrió con sus manos lo largo de sus brazos,aquellos que solo habían sentido el estrujor de otras manos ante el maltrato... sintió su corazón latir con frenesí

Se acercó hasta su oreja con tal sutileza y le susurro:
"Eres... la mujer más maravillosa... que Dios pudo haber creado... , doy gracias... por haberte puesto en mi camino"...
aquellos oídos que se habían acostumbrado a escuchar insultos denigrantes, menos precios y humillaciones, ahora eran ensalzados ... una lágrima se asomó en sus mejillas, la tomó del rostro con ambas manos y secó sus lágrimas con sus labios... Fue así que volvió a sentir la suavidad de una caricia y el calor de un verdadero abrazo, se sintió amada...



8 comentarios:

  1. Qué hermoso relato, Ana. Después de haber pasado por una relación tormentosa a manos de un compañero que no sabe querer, llega el amor sincero y pausado. Un bálsamo para el corazón que puede restaurar vidas y corazones.

    Precioso, me ha encantado!!

    Un saludo cordial, amiga.

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    1. Es verdad, hay personas que creen saber amar... El amor va más allá de vivir con alguien y hacer vida marital... Me alegra mucho que le haya gustado. Abrazo fraternal.

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  2. Que bello es encontrar y saborear al fin, al verdadero amor. Un relato hermoso que muestra una cara del miedo, y la otra del amor.
    Un cordial saludo Ana.

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  3. Que lindo Ana, es un relato que toca a muchas almas, tan real y tan fantástico a la vez. Nunca hay que darle la espalda al amor, siempre llega. Un beso.

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